Sin ser un puzzle, cada uno estamos hechos de pedacitos de colores y vivencias de aquí y de allá, engarzadas como un frágil abanico. Dónde lo guardamos y cómo… es importante.
Tu abanico es mariposa,
que en tu mano se posó,
porque en su vuelo otra rosa,
más bonita no encontró.
Lo escribieron los hermanos Álvarez Quintero, (Amores y amoríos), y lo recordé, al coser la funda de mi abanico.
Pero el abanico, es para eso,
para hermanar el corazón y el aire,
“Un tiempo fraternal, humanamente…
y un aire conocido y hermanado
a otro aire que presienten estas venas,
del aire le hablará”
para hermanar el corazón y el aire,
o como dijo el argentino Héctor Yánover, para traer consuelo.(Blog hojas del abanico)
“Un tiempo fraternal, humanamente…
y un aire conocido y hermanado
a otro aire que presienten estas venas,
del aire le hablará”
Esta funda la saqué de la revista Patchwork Secrets proyecto de Fabiola Granados. Ella lo hizo bordado, pero yo como lo veo todo con puntada escondida, lo hice con aplicaciones, y así ha quedado. Es mi toque personal.
Un gran abrazo para los que pasais por aquí